miércoles, 24 de noviembre de 2010

PREGUNTAS DE LA CELESTINA

El siguiente trabajo consiste en resolver estas cuestiones sobre el contenido ideológico de La Celestina; no os acobardéis ante la dificultad del enunciado, y estrujaros las entrañas del cerebro todo lo necesario.

En el apartado comentarios al final de esta entrada, podéis preguntarme todo lo que queráis, intentaré ayudaros lo mejor posible.

11 CUESTIONES

1. Señala, al menos, cinco factores, que expliquen la desintegración del sistema feudal.

2. Explica esta relación causa – efecto: + progroms → + judíos conversos

3. ¿Qué trae consigo, esencialmente, el reinado de Juan II?

4. Enumera cuatro hechos decisivos en la historia de España ocurridos en 1492.

5. El imperio español nace con los gérmenes de su propia destrucción. Señala y explica todos los factores que conducen hacia el establecimiento de una economía y una cultura “divinales”. Por cierto, ¿qué significa ese adjetivo atribuido a esos dos sustantivos?

6. Escribe en menos de cinco líneas el argumento de La Celestina, utilizando los nombres de estos personajes: Calisto, Melibea, Sempronio, Pármeno, Celestina, Areúsa, Elicia y Pleberio.

7. Interpreta el significado de las tres afirmaciones del texto de Areúsa “Ruin sea quien por ruin…” (pág. 2 de los apuntes)

8. Explica con tus palabras adultas por qué quiso ser prostituta. Ideológicamente, de qué es síntoma esta postura?

9. Esclarece el contenido del conflicto querer ser – tener que ser en el Libro de buen amor y en La Celestina.

10. ¿Por qué decimos que la angustia por el tiempo perdido es una característica de los nuevos valores burgueses?

11. El nuevo mundo renacentista conlleva la aparición de algo nuevo: la soledad y la lucha a nivel individual por sobrevivir en un universo ya no ordenado ni cerrado ni perfecto, y dominado por unas nuevas relaciones de producción, las burguesas. En las cuales, la cosificación del trabajador y por extensión del ser humano es un producto del fetichismo del todopoderoso dinero y de la “cosa” producida. Razona:
a) ¿Por qué se manifiesta más intensamente con la aparición del renacimiento y de la sociedad burguesa la soledad y la lucha a nivel individual?
b) Razona los tres adjetivos que caracterizan el universo feudal: ordenado, cerrado y perfecto.
c) ¿En qué se basan las nuevas relaciones de producción burguesas?
d) ¿Qué significa el concepto “cosificación?
e) Explica qué entiendes por el “fetichismo del todopoderoso dinero”.

12. En relación con la tensión amos – criados en La Celestina, explica el uso dado a las palabras “fidelidad” y “lealtad”. ¿Qué diferencia básica hay entre relaciones serviles feudales y relaciones sociales burguesas?

lunes, 22 de noviembre de 2010

ROMANTICISMO. ESPAÑA. SIGLO XIX. BÉCQUER


El punto de partida de la poesía moderna española son las Rimas de Gustavo Adolfo Bécquer (1836-1870), publicadas en 1871.
            La originalidad de su poesía se aprecia más claramente al compararla con las otras poéticas de Campoamor o Núñez de Arce. Este es un fragmento del propio Bécquer al distinguir los dos tipos de poesía:

Hay una poesía magnífica y sonora; una poesía hija de la meditación
y el arte, que se engalana con todas las pompas de la lengua, que se mueve
con cadenciosa majestad […] Hay otra natural, breve, seca, que brota del alma
 como una chispa eléctrica, que hiere el sentimiento con una palabra y huye,
y desnuda de artificio, desembarazada dentro  de una forma libre, despierta con
una que las toca, las mil ideas que duermen en el océano sin fondo de la fantasía […]


            La segunda, la poesía de Bécquer, no nace de las ideas, sino de un misterioso proceso creador más semejante a una visión y que, favorecida por un peculiar estado de ensoñación, se sitúa por debajo del nivel de pensamiento consciente y aún de la coordinación lógica:

Ideas sin palabras
palabras sin sentido
cadencias que no tienen
ritmo ni compás.
Memorias y deseos
de cosas que no existen.

            Lo que condiciona su poesía no es la reflexión consciente, sino las emociones, “porque la poesía es el sentimiento”.

4 temas básicos en las Rimas:

I-XI: la poesía y el poeta
XII-XIX: el amor en su fase ascendente y esperanzada
XXX-LI: la tristeza y la desilusión
LII-LXXIX: soledad y desesperación.

En el primer grupo, Bécquer toma la idea del poeta vidente, sintonizado con un espíritu del mundo que emana fundamentalmente de Dios (“perfume misterioso de que es vaso el poeta”). El poeta, a pesar de sus deseos, no puede lograr una unidad total con ese espíritu, fuerza que se esconde tras el acto poético, esencial pero indefinible. Así, toda poesía es siempre “esa aspiración melancólica y vaga que agita tu espíritu con el deseo de una perfección imposible”. El amor “es el manantial perenne de toda la poesía” y la mujer, “el verbo poético hecho carne”

ROMANTICISMO. ESPAÑA. SIGLO XIX. ESPRONCEDA

También en el siglo XIX, otro espíritu inconforme, JOSÉ DE ESPRONCEDA (1808-1842), había glosado los fallos sociales de la desamortización. Culpa al Estado porque la riqueza produce pobreza; al dividir las vastas posesiones en pequeñas partes, los ricos compraron tanto como quisieron y se produjo de nuevo la acumulación.

Si Larra es un crítico guerrero en la lucha cotidiana, Espronceda, además, busca el sueño romántico que apoyado en la imaginación impulsa al poeta a “la loca fantasía”. El poeta llega al vértigo y a la confusión, queriéndose alejar de la realidad objetiva. Si la realidad española equivale a desengaño liberal, a carlismo y a ilusiones perdidas, ¿por qué unir todo esto y escapar por el sueño? Valgan estos versos de El estudiante de Salamanca, donde asesina al tiempo con las balas de la fantasía y la pesadilla:

Corre allí el tiempo, en medio sepultado.
Las muertas horas a las muertas horas
siguen en el reloj de aquella vida,
sombras de horror girando aterradoras,
que allá aparecen en medroso ruedo.

Espronceda exalta el yo, lo marginado que el tiempo y el espacio desechan: el reo, el pirata, el amor avasallador en duelo con la muerte. Su lugar de huída es el Estambul de la exótica Canción del pirata, donde el paisaje romántico de noche, luna, vientos, tempestad, es también una expresión de la libertad.

Espronceda estuvo mucho tiempo exiliado, participó en algunas batallas en primera línea, padeció persecuciones y cárcel, siempre a favor de la libertad y el progreso, opuesto al autoritarismo y al carlismo.

Sus dos poemas más ambiciosos son El estudiante de Salamanca (1836-1837) y El diablo mundo (1840).

El estudiante de Salamanca consiste en más de 1700 versos donde divaga sobre la injusticia social y los males del siglo. El poema mezcla la fantasía con la historia, lo anecdótico es la trama. El protagonista es un segundo Don Juan, cínico, materialista y vulgar. Don Félix de Montemar engaña a Elvira, ésta enloquece de amor y, Ofelia atormentada, se suicida. Los sueños y las pesadillas son la música de fondo en contrapunto con el mundo frío, cínico y egoísta de este Don Juan, un nuevo burgués que se juega sus días, su amor y la muerte. El dinero es quizás su única pasión:

Necesito ahora dinero
y estoy hastiado de amores.

Con soberbia, se dirige a sus compañeros de juego para ofrecer una cadena de oro que apuesta al as de oros, para perderla. “Perdida tengo ya el alma / y no me importa un ardite”. El empedernido jugador busca cualquier otra prenda y pone sobre el tapete un retrato con marco de pedrería. Hasta los más encanallados sienten la hermosura de Elvira; él, impertérrito en su cinismo, responde:
A estar aquí la jugara
y ella, al retrato y a mí.

El diablo mundo es un poema de seis cantos. Aquí, vuelven a aparecer las antítesis de Espronceda: individuo/sociedad; amor/muerte; libertad/lejanía, que enlaza hábilmente con visiones, sensaciones y sentimientos siniestros. Hordas horripilantes, genios sombríos rodean al poeta en danzas macabras que le aterran y le hacen reflexionar.
Ataca al “necio audaz”, a condes, a los antiliberales, los antiprogresistas, los ministros, los jefes políticos, la política, la ley marcial, y el bozal de la palabra escrita.

Es preciso señalar los elementos que en Espronceda anuncian a Bécquer: violencia y vértigo 
se enlazan al mundo del sueño impreciso, de la niebla. Lo vemos en El diablo mundo:

y como el polvo en nubes que levanta
en remolinos rápidos el viento,
formas sin forma, en confusión que espanta,
alza el sueño en su vértigo violento.
O en El estudiante de Salamanca:
¡Ay el que vio acaso perdida en un día
la dicha que eterna creyó el corazón,
y en una noche de nieblas, y en honda agonía
en un mar sin playas muriendo quedó!

Resumiendo, Espronceda ataca la hipocresía y se conduele de los siervos y los marginados. Rompe lanzas por la igualdad, la libertad y la fraternidad; pero también huye a la fantasmagoría y al sueño como rompeolas contra el mundo; vida y obras contradictorias en un difícil y contradictorio momento de transición.

ROMANTICISMO. ESPAÑA. SIGLO XIX (2)


TRIUNFO DE LA BURGUESÍA. TRADICIÓN Y REVOLUCIÓN

En 1839, termina la guerra carlista. Al año siguiente, el vencedor, el general Espartero, líder militar de los progresistas, envía al exilio a la Reina Madre, María Cristina, y se eleva él mismo a la categoría de Regente, ello en nombre de “la inocente niña”, Isabel II.
En 1843, un golpe militar acaba con Espartero, Isabel II es declarada mayor de edad. Gobernará el general Narváez de 1844 a 1854, representante de los conservadores con una nueva constitución, la de 1845.
Narváez representa los intereses de los tradicionalistas, pero también los de una burguesía agresiva y en auge. Se ha iniciado ya el despegue económico. Junto a esto, crece el proletariado y se resiente la agricultura. Las dos Españas (centro y periferia, industrial y agraria), ahondan en su polarización.
1854: sublevación militar de los liberales que durarán en el poder hasta 1863. Esta vez, el pueblo participa activamente en el acontecimiento, creyendo en sus líderes militares, y en Madrid saliendo a la calle para incendiar palacios. La economía sigue su progresión capitalista; y, a su lado, el proletariado industrial (116.000 obreros ya) ya posee una organización capaz de lanzar huelgas reivindicativas, y los campesinos también actúan de forma revolucionaria.
Al nivel de la política establecida y aparte del moderantismo de los liberales en el poder, se distinguen dos grupos más avanzados, el de los progresistas, y el más radical de los demócratas.
1863-1868: años de confusión política en el poder. La economía detiene su avance, se produce un crack financiero en 1866, seguido de una fuerte crisis alimenticia que va en aumento hasta 1868, jalonada por revueltas, saqueos y destrucción de propiedades. Acto seguido, se produce la revolución que expulsa a la reina del país.

sábado, 20 de noviembre de 2010

La Celestina. Argumento y contenido ideológico

La Celestina. Argumento y contenido ideológico










Se publica en Burgos en 1499.
Argumento: El joven y rico Calisto se enamora arrebatadamente de Melibea, hija de unos poderosos burgueses de la ciudad. Consigue los favores de la dama por intermedio de la vieja Celestina. Cierta noche, tras la visita clandestina y gozosa al jardín de Melibea, Calisto muere al caer de las tapias del huerto, ella se suicida seguidamente, incapaz de vivir con su amante.

a)     Enfrentamiento individuo - sociedad
Uno de los problemas fundamentales de la obra es el enfrentamiento del individuo contra la sociedad. Los personajes celestinescos son conscientes del valor de sí mismos (excepto Calisto), de su importancia y dignidad personales. La prostituta Areúsa declara:

“Ruin sea quien por ruin se tiene. Las obras hacen linaje, que al fin, todos somos hijos de Adán e Eva. Procure de ser cada uno bueno por sí e no vaya buscar en la nobleza de sus pasados la virtud.”

La misma Areúsa porque no ha querido por qué no ha querido nunca ser criada, prefiriendo la prostitución:
¡…qué duro nombre e qué grave e soberbio es “señora” contino en la boca! Por esto me vivo sobre mí, desde que me sé conocer. Que jamás me precié de llamarme de otro, sino mía.

Pero una cosa es lo que los personajes piensan, y otra lo que pueden hacer con sus vidas, atrapados y condicionados.

b)     Conflicto querer ser – tener que ser

El querer ser, de un lado, y el tener que ser de otro, es un conflicto presente en toda la literatura del siglo XV, contando con el gran antecedente del Libro de buen amor. En La Celestina es Areúsa quien ejemplifica mejor el querer ser:

“Nunca alegre vivirás si por voluntad de muchos te riges”.

Pármeno rechaza primero traicionar a su señor, pero después, maltratado e insultado por su señor, decide aceptar diciendo:

“¡O, desdichado de mi! Por ser leal padezco mal. Otros se ganan por malos; yo me pierdo por bueno. ¡El mundo es tal! Quiero irme al hilo de la gente, pues a los traidores llaman discretos, a los fieles necios”.

En definitiva, el mundo es de tal modo que no permite la existencia de fidelidad ni de honestidad; hay que sobrevivir, es decir, es preciso tener que ser.[1]

c)     Angustia por el tiempo perdido

A pesar de todo, los personajes, conscientes de su valor, tienen una voluntad definida de vivir y actuar; esto se traduce en el placer de vivir y en disfrutar de la intensidad de ese placer. Por eso los personajes de Rojas viven con prisa[2]. Y al lado de ello, la angustia por el tiempo perdido y que pasa sin remedio. Lo que importa ahora es el tiempo y la vida del ser humano en ese tiempo. Bien claro lo dice la vieja Celestina: 

“Muertas sí; cansadas no. Si de noche caminan, nunca querrían que amaneciese; maldicen los gallos porque anuncian el día e el relox porque te dan tan apriessa…Camino es, hijo, que nunca me harté de andar. Nunca me vi cansada.

Y Pleberio, padre de Melibea:

“…el tiempo, según me paresce, se nos va, como dicen, entre las manos. Corren los días como agua de río. No hay cosa tan ligera para huir como la vida”.

Y así es, si Calisto murió de modo arrebatado, Pármeno y Sempronio, los dos criados, “madrugaron a morir”. Así, trágicamente (“muertos sí, cansados no”), terminan los personajes de La Celestina.

d)     Fracasos del ser humano en el siglo XV

El yo de la persona (querer ser) fracasa, el vivir intensamente fracasa, ¿qué les queda a los personajes? La comunicación y la solidaridad con los demás seres humanos. Pero esa palabra también fracasará, pues se pervierte su significado al utilizarlo.
Quizá el momento más patético de toda la obra sea aquel en que el joven Sosia cuenta a Tristán (la pareja de criados que sustituye a la primera, degollada públicamente por el asesino de Celestina) lo ocurrido con Pármeno y Sempronio:

“Nuestros compañeros, nuestros hermanos…Ya sin sentido iban, pero el uno, con harta dificultad, como me sintió que con lloro le miraba, hincó los ojos en mí…como preguntándome qué sentía de su morir. Y en señal de triste despedida, abajó su cabeza con lágrimas en los ojos.”

En el último instante de su existencia, un ser humano intenta, de modo definitivamente sincero, buscar la solidaridad y la comprensión de otro: queda todavía la mirada, cuando la palabra ha demostrado su mentira pervertida. Pero lo realmente trágico es que, aún así, todo es inútil.

Pues lo cierto es que en La Celestina todo intento de realización de la persona y de comunicación está condenado al fracaso. Junto a los continuos llamamientos a la solidaridad, a la amistad, al compañerismo, encontramos la mentira, la traición, el engaño, la desconfianza y la inseguridad.

“A quien dices el secreto, das tu libertad”. (Pármeno)

“¿En quien hallaré yo fe? ¿Adónde hay verdad? ¿Quién carece de engaño? ¿Adónde no moran falsarios? ¿Quién es claro enemigo? ¿Quién es verdadero amigo? ¿Dónde no se fabrican traiciones…? (Calisto)

e)     Fracaso del amor
Al llegar aquí, hemos de preguntarnos si no será el amor lo que realmente ponga en comunicación a los personajes, si el amor es la auténtica vía de salvación.
Pero la corrosiva ironía de Fernando de Rojas está presente aquí como en todos los aspectos y niveles de la obra. Melibea, que se entrega a Calisto con plena conciencia de lo que hace, tiene la desgracia de haberse enamorado de alguien que, evidentemente, no se halla a su altura humana. Una escena del acto IX pone de relieve la personalidad amorosa de Calisto. Tras las canciones, la descripción del jardín, Calisto oye las quejas de Melibea:
“¿Para qué me tocas en la camisa…? Holguemos e burlemos de otros mil modos que yo te mostraré; no me destroces ni maltrates como sueles…”
Y éste le responde:
“Señora, el que quiere comer el ave, quita primero las plumas.”

Esta frase es muy importante porque demuestra dos cosas:
  1. La destrucción definitiva de todas las retóricas finas e hipócritas del amor cortés típico de los trovadores.
  2. Expone un fenómeno básico de la sociedad burguesa: la cosificación, el proceso en que un ser humano se convierte en simple cosa utilizable con fines egoístas y personales.
f)       La Celestina: bisagra entre el mundo feudal y el mundo burgués.

Una idea básica más: la obra de Rojas es consecuencia del choque entre el mundo medieval, ya en completa descomposición, y el mundo renacentista burgués. Se trata de una obra cuyo autor refleja admirablemente la situación de una Castilla nueva:
-          se ha roto el feudalismo tradicional y teocrático[3].
-          están naciendo las bases del sistema moderno y absoluto.
-          la fragmentación de la persona es una consecuencia palpable.

Todo ello lleva a la aparición de algo nuevo: la soledad y la lucha a nivel individual por sobrevivir en un universo ya no ordenado ni cerrado ni perfecto, y dominado por unas nuevas relaciones de producción, las burguesas. En las cuales, la cosificación del trabajador y por extensión del ser humano es un producto del fetichismo[4] del todopoderoso dinero y de la “cosa” producida. Así, todo se transforma en objetos vendibles; aumenta el valor de las cosas y disminuye el de los seres humanos.

El nuevo fetichismo y la cosificación aparecen en La Celestina en términos crudamente realistas. Todas las invocaciones y programas de amistad, solidaridad, comunicación, fracasan estrepitosamente ante la realidad del dinero y de la lucha entre pobres y ricos.
Los señores explotan y desprecian a sus criados:

“Estos señores deste tiempo más aman a sí que a los suyos. E no yerran. Los suyos igualmente lo deben hacer…”

Sempronio dirá sencillamente, en otro momento, que “quien sirve, no es libre”. Y la inteligente Areúsa dirá con perspicacia:

“Nunca oyen las sirvientas su nombre propio de la boca dellas, sino puta acá, puta acullá, ¿a do vas, tiñosa[5]?, ¿qué hiciste, bellaca?... Por esto, madre, he querido más vivir en mi pequeña casa exenta[6] e señora que no en sus ricos palacios sojuzgada e cautiva.

En La Celestina, pues, asistimos a la liquidación de los valores del mundo feudal y también a la negación de los nuevos valores burgueses, pues en la obra, simplemente, no existe el futuro; el pesimismo de Rojas ante la realidad circundante le ha llevado a un estremecedor callejón sin salida. Toda la obra se encierra en la última frase de la misma, dicha por Pleberio:
“¿Por qué me dejaste triste e solo in hac lacrymarum valle?”

Inhumana y fría, impasible como el reloj que ha marcado las horas de los personajes, solamente queda en pie, en medio de tanta angustia y miseria, esa simbólica ciudad castellana en que Fernando de Rojas ha hecho vivir y morir a sus héroes.


[1] Pármeno resulta así un antecesor trágico de otro famoso corrompido de la literatura española, Lázaro de Tormes, no sólo más cínico sino también más habilidoso para mantener la cabeza sobre los hombros.
[2] Recordar que Calisto muere , precisamente, por su salida arrebatada del jardín.
[3] Sociedad en que la autoridad política, considerada emanada de Dios, se ejerce por sus ministros.
[4] Fetiche: Ídolo u objeto de culto al que se atribuye poderes sobrenaturales, especialmente entre los pueblos primitivos.
[5] Escasa, miserable y ruin.
[6] Aislada, independiente.

ANIMISMO vs. ORGANICISMO

ANIMISMO vs. ORGANICISMO: Definición y estudio comparativo de dos sistemas ideológicos en conflicto



Animismo: ideología derivada de los valores burgueses.
Organicismo: ideología derivada de los valores feudales.

Animismo

Sin la idea del alma libre o el sujeto libre, no se hubiera podido construir la imagen del sujeto social que fabrica y consume productos (base del sistema burgués). Un siervo pegado a la tierra y a la sangre no funciona dentro de esta ideología.
El animismo, pues, supone la dualidad, el frotamiento entre el alma y el cuerpo: el alma presente en el cuerpo, capaz de atravesarlo y purificarlo. El alma bella y libre es originaria y fundamentadora de todo. Es el soporte del sujeto libre y autónomo; es la verdad hacia la vida, el presente que existe, el amor o la lealtad entre iguales, la simpatía o el furor erótico.

Organicismo

Supone la corrupción del alma por el cuerpo, el peso de lo físico, lo orgánico. El cuerpo que contamina al alma y la pudre, la mortificación a través del cilicio[1], la no existencia de libertad, belleza y pureza; es la verdad de la muerte, es la jerarquía de sangres y la calavera en vez del rostro: sólo existimos como aviso de la muerte.
No hay posibilidad de igualdad o de cambios sustanciales. No hay erotismo sino servidumbre. No hay simpatía o furor erótico (no hay “atracción”) sino semejanzas entre seres de igual jerarquía.


[1] Faja de cerdas o de cadenillas de hierro con puntas, ceñida al cuerpo junto a la carne, que para mortificación usan algunas personas. (Como el cuerpo es la encarnación de Cristo hay que contar siempre con él pero hay que mortificarlo, dañarlo, para que no llegue a creerse una realidad en sí misma.

viernes, 19 de noviembre de 2010

ROMANTICISMO. ESPAÑA. SIGLO XIX

Antes de iniciar la explicación de la historia de España del siglo XIX, importa recordar que, en el XVII, los Borbones (principalmente, Carlos III), derogaron leyes y decretos para alentar el espíritu empresarial de los nobles e intentar cambiar la configuración del país, y que nuestros escritores ilustrados (Feijoo, Cadalso, Jovellanos, etc.) sentaron las bases para la desamortización eclesiástica y para romper con las estructuras tradicionales del Antiguo Régimen.

Sin embargo, al inicio del siglo XIX, ocurrirán cambios que resultarán decisivos y que separan ya definitivamente el siglo XIX del anterior.

En España, el primer impacto lo provoco la Invasión Napoleónica (1808-1813), que, además de provocar la guerra de Independencia, dividió al país en dos bandos.


1. Los liberales, en los que aparecen, por un lado, enemigos de la invasión napoleónica, y, por otro lado, los afrancesados, defensores de la monarquía parlamentaria, muchos de los cuales tuvieron que morir en el destierro por su alianza con el gobierno del rey francés José Bonaparte.

2. Los conservadores, defensores del absolutismo y de los valores tradicionales.

Estas contradicciones se reflejaron en las Juntas (la organización que dirigía la guerra contra los franceses), en las que se encuentran liberales que entienden la guerra de Independencia como lucha por las transformaciones sociales, y conservadores que retroceden al absolutismo total.

La guerra antinapoleónica desemboca en las Cortes de Cádiz (1810-1812, donde los liberales logran que sus ideas salgan adelante en la Constitución del 12 ("La Pepa").

Dicha constitución propone una serie de cambios orgánicos en la sociedad civil que la hacen incompatible con el Antiguo Régimen: soberanía popular, división de poderes, supresión de la Inquisición, desamortización eclesiástica...
Pero estos liberales progresistas no tenían, en realidad, una base social en la que apoyarse, y no lograban entenden las verdaderas razones que movían a muchos españoles a luchar contra los franceses.
De ahí, la gráfica frase de Marx "en Cádiz, ideas sin actos; en el resto de España, actos sin ideas". No es extraño que a su llegada al país Fernando VII pudiera liquidar en 1813 toda la obra de las Cortes, haciendo que triunfara (momentáneamente) el "vivan las caenas" sobre España.

jueves, 18 de noviembre de 2010

LA CELESTINA

INTRODUCCIÓN

INTRODUCCIÓN AL ROMANTICISMO



UN POCO DE HISTORIA




VÍDEO DE PINTURAS DEL ROMANTICISMO



PRESENTACIÓN EXPLICATIVA EN POWER POINT

Cortometraje animado de "El corazón delator" narrado por el gran James Mason





Versión particular del poema por "Los Simpson"




Ahora, la mezcla final: el poema recitado con las imágenes de los Simpson.




¡A disfrutarlo!

miércoles, 17 de noviembre de 2010

LITERATURA. TEMA 2. LA CRISIS DEL SIGLO XIV

TEMA 2: LA CRISIS DEL SIGLO XIV



Factores que provocan la crisis del sistema feudal en el siglo XIV:

- Sublevación de campesinos en situaciones extremas de hambre y pobreza
- LA PESTE. Huida de campesinos a las ciudades, falta de brazos para trabajar las tierras. Los campesinos se atreven a poner condiciones a los propietarios:
“Había muchos hombres y mujeres ociosos y sin querer labrar y…aquellos que iban a labrar exigían tan grandes precios, salarios y jornales que los dueños de las tierras no los podían pagar; y por esta razón las tierras se quedaban yermas y sin trabajarlas.”

- Incapacidad de la clase dominante tradicional para controlar y explotar la fuerza de trabajo campesina
- Evolución del comercio y la economía monetaria
- Iglesia fragmentada y dividida (tiene tres papas a la vez, en medio de una guerra entre países europeos que durará cien años).
- La predicación mendicante, que defiende la pobreza de Cristo y de la Iglesia.
- Proliferación de movimientos apocalípticos.
- Malestar antiseñorial del pueblo.

Las relaciones sociales serviles en las que los seres humanos vivían sus vidas como estables e inmutables, sin posibilidad de cambio empiezan a entrar en decadencia.
Consecuencia en literatura: primeras manifestaciones de soledad, angustia e inseguridad; el sistema feudal absoluto colocaba a cada hombre en su lugar y eliminaba la rebeldía y la insatisfacción. Ahora, cuando el sistema empieza a quebrarse, los hombres se plantean conflictos sobre su relación con el mundo, la realidad exterior les parece amenazante.
Además, el conflicto entre Monarquía y Nobleza se agudiza, así como las guerras internas entre distintos reinos cristianos.

lunes, 8 de noviembre de 2010

EL CUERVO. Resumen



 RESUMEN DE “EL CUERVO”

Ideas que deben aparecer:

-         La muerte de Leonor
-         El dolor eterno del narrador
-         El cuervo es una pesadilla: es la voz de su subsconsciente (que está ligado a los sueños).
-         ¿Por qué utiliza un elemento sobrenatural para expresar el dolor? Para expresar el sentimiento del narrador y porque no encuentra nada en la vida (corriente) que pueda explicar esa pena, porque su tormento le parece precisamente “sobrenatural”. 
- La lucha con el cuervo significa la lucha contra sus tormentos; pretende que esos sentimientos se vayan. Al final, como profetizaba el diabólico animal, nunca más podrá olvidar o escapar de él.

TAREA: Escribe el resumen de este poema partiendo de las ideas extraídas y utilizando, al menos, tres conectores (por ejemplo: sin embargo, a pesar de que, no obstante...)